«Chicago» de Surjan Stevens, canción elegida por Juan Manuel Subirán
Como buen indie de palo, cuando leo muchas veces un nombre en críticas y webs de música entiendo que le tengo que coger manía ya que debe ser algo a punto de pasar al mainstream. Por ese tontísimo motivo supongo que no he prestado atención a Surjan Stevens.
Hasta que escuché una de sus canciones, sin saberlo, en la película de Verónica Mars. Y es que a veces tiene que venir un producto comercial a descubrirte canciones que te perdiste por ir de Indie.
“Me llamas” de José Luis Perales. Canción elegida por Manuel Domínguez
Una de esas veces que le pasas a una amiga un pen lleno de música con lo mejor que has escuchado últimamente y las novedades que vendrán a los próximos festivales, más algunas carpetas de varios indispensables y ella va a fijarse en una cosa llamada “Cachitos” en homenaje al programa de La2 donde tengo almacenados temazos algo rancios pero siempre notables en boca con recuerdos a tiempos mejores, de los 60, 70 y 80 como este que os pongo hoy.
Y es que el mismo regustico me da escuchar algo de Iván Ferreiro que este placer culpable que compuso en 1979 un electricista llamado José Luis Perales Morillas. Un electricista que acabaría vendiendo más de 50 millones de discos, cuando se vendían discos. Como Iván Ferreiro también es mejor letrista que cantante y también ha quedado ensombrecido por otros grandes artistas de la época como Julio Iglesias o Raphael. Entre sus fanes hay dudas sobre si esta canción va dedicada a su hija, aunque parece que la que habla de ésta es “Y como es él”.
Ojalá una vuelta a las orquestas, a las grandes producciones, al peralismo: Yo lo veo.
«Radioactive» de Imagine Dragons. Canción elegida por Verónica Fernández
Ultimamente sólo escucho música en el trayecto de ida y vuelta del curro. Como soy un poco vaga para cambiar las emisoras guardadas en el coche, escucho las sintonizadas (Los 40 principales, Europa FM, Rock FM..).
Todas las noches cuando salgo del curro comienza Euroclub y todos los días alguien pide que le pongan esta canción así que la tengo asociada al final de una tarde de curro y vuelta a casa.
He de reconocer que me gusta mucho, me transmite buen rollo y su melodía es super pegadiza. Como dice su letra «welcome to the new age», esperemos que con la primavera cambie todo nuestro entorno un poquito. De momento la ciudad está llena de color con las flores (cuando hay sol, claro). Feliz finde a todos!!
«No surprise», Radiohead. Canción elegida por El_Tesorero.
Esta semana he vuelto de un nuevo viaje a Polonia por motivos laborales. Siempre es agradable volver a ciudades o países de donde guardas buenos recueros, en este caso donde pasé mi año de Erasmus. Ayer leí un pequeño artículo sobre «las cosas que recordarás de tu Erasmus«, con chascarrillos de ésos que sólo te harán gracia si has vivido esa experiencia; y debo decir que me emocioné al leerlo.
Sin embargo, también me di cuenta de una cosa; todo aquello fue hace casi siete años, y por contra he viajado al país por trabajo dos veces en los últimos cuatro meses. Los hoteles, las comidas de negocios y los polacos trajeados están sustituyendo en mi memoria a los pisos de estudiantes, los menús comunales y los estudiantes venidos de toda Eropa.
Cuando oigo la palabra «Polonia», por supuesto que para mí es sinónimo de libertad, de fiesta, de amistad. Pero no me gustaría que llegase el día que al oír la misma palabra se me viniesen a la mente las estadísticas económicas, los estudios de mercado, las oportunidades de negocio…
Ante esto, urge un viaje de purga, con mochila en vez de maletín, acompañado de seres queridos y -a ser posible- de viejos compañeros; pasear por las mismas calles con la despreocupación y la curiosidad de antaño, sin dejarse embargar demasiado por la añoranza y sin ser demasiado crítico con lo que se está convirtiendo tu vida (que en mi caso me encanta).
Hay un fenómeno conocido como el síndrome post – Erasmus, muy bien reflejado en el film francés L’Aberge Espagnole en la piel de Xavier cuando vuelve a su país y se reincorpora a su vieja vida, mientras suena esta canción de Radiohead que le viene como anillo al dedo. Algunos dicen que «No surprises» es un himno al suicidio, yo creo que sólo es una canción que invita a la melancolía, a la reflexión, al recuerdo.
La vida de Erasmus no es necesariamente mejor que la que tenemos en casa, tan sólo es un lapsus de algo distinto a lo que es TU VIDA; un maravilloso recuerdo que debe quedar atrás pero que tiene que permanecer inalterable en tu memoria.