Granada Sound 2015

Como dijo Juan Alberto de Niños Mutantes: “Tiene narices que haya tenido que venir un sevillano a hacer un buen festival de música en Graná” ¿Será por esto que hemos pasado de Alhambra a Cruzcampo?

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Sea como fuere el caso es que el festival granadino ha dado un enorme salto de calidad en su cuarta edición, con un recinto mucho más amplio y práctico, una variada oferta gastronómica y la colaboración de muchas marcas como In-Side, Red Bull, Negrita… que con sus carpas dinamizaron una programación que ya de por si no daba respiro a un festivalero que pudo disfrutar de un gran fin de semana con un cartel con el mejor  indie-mainstrean español.

Las puertas se abrían a las cuatro de la tarde con mucho calor y mucha bebida de por medio, donde los litros de Cruzcampo y los mojitos de Negrita con su 2×1 hasta las 18:00h fueron los grandes triunfadores. Aunque también es bien cierto que el resto de marcas eran tan conocidas como el wisky Sir Edward’s, el vodka Poliakov o la ginebra Gin Giro.

IMG_20150919_234443012Con dos grandes escenarios en paralelo que se sucedían sin descanso pudimos disfrutar de actuaciones épicas como la de Supersubmarina (apagón mediante) con fuegos artificiales para celebrar LN Granada, la de Dorian con un final de gira apoteósico lleno de papelillos, unos coreadísimos Izal presentando su recién sacado del horno Copacabana o Niños Mutantes que jugaban en casa y se rodearon de lo más granado de la música granadina para aderezar su magnífica actuación. Antonio Arias, Lori Meyers, Napoleón Solo y hasta La Habitación Roja pasaron por el escenario durante la actuación de Niños Mutantes.

Estos triunfadores estuvieron arropados por otro grupo de artistas que dieron muy buenos conciertos y subieron el nivel del festival. Zahara abriendo y Varry Brava cerrando dieron ejemplo de cómo sus carreras se han consolidado en los últimos años. La Habitación Roja y Sidonie pusieron las tablas y se llevaron al público desde la primera nota sus conciertos después de dos grandes giras. Nacho Vegas hizo las delicias de unos fans entregados que disfrutaron del asturiano mientras anochecía en el recinto y L.A ofreció uno de los conciertos más limpios del frestival: Sonido, voz y puesta en escena impecables. También hubo momentos para el pop rapeado con un sorprendente Carlos Sadness  y un accidentado Delafe que se lesionó en pleno concierto y tuvo que sentarse para dejar todo el protagonismo a Las Flores Azules ¿será por eso que se han separado? Seguro que no. Mucha suerte a los dos aunque será difícil que ninguno de ellos se acerque a la calidad que han atesorado estos años como grupo.

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El toque internacional lo pusieron unos Kooks que aunque sonaron redondos y dieron una clase magistral de actitud y saber estar hicieron un concierto bastante plano donde no acabaron de enganchar a un público más entregado a las bandas de casa.

Un festival con alguna deficiencia en el sonido, menos váteres de los necesarios y marcas de bebidas propias de un mercadillo. Un festival con una amplia variedad de comida, zonas para descansar,  sin solapamientos de las grandes bandas…. Un festival que crece. Un festival en Granada.

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Alhambra Sound 2014 ( 19/09/14)

1

La facción más festivalera de El Gallo Verde viajó a Granada, una de las cunas del indie nacional, para asistir a la tercera edición de Alhambra Sound. Tras haber visitado algunos de los bares emblemáticos de la ciudad, como el Bar de Eric, el Playmovil o el Planta Baja la noche anterior, nos encaminamos al recinto de los conciertos situado en la Feria de Muestras de Armilla.

Después de un largo paseo (gracias Mercedes por la idea) llegamos al lugar, donde tuvimos que esperar un par de minutos porque hasta las 14:00h en punto no se podía entrar en el recinto gracias a la decisión, no exenta de polémica, de permitir el acceso a todos los asistentes desde esa hora. Y a partir de ahí el maratón indie más loco:

2

Genérica

Los más madrugadores pudimos disfrutar de la gran sorpresa que supuso este grupo de amigos sevillanos, ganadores del concurso de talentos que organizaba el festival, que se nutren de influencias tan recientes como  The New Raemon, Vetusta Morla, Supersubmarina, Iván Ferreiro,  y Los Planetas, entre otros. Con temas como «Corona de Espinas» disiparon los pocos nubarrones que quedaban y nos mostraron el camino para una jornada llena de buenos conciertos. Su media hora de actuación nos supo a poco.

Sexy Zebras

El trío de Madrid se entregó por completo a sus fans en los escasos 30 minutos de su actuación. Algo muy meritorio, ya no sólo por el escaso tiempo, sino también por la calor que hacía en el recinto a esas horas. Tenemos que dar las gracias a Inside por esos gorros amarillos que nos ayudaron a paliar un poco el calor. Nos hicieron bailar y saltar al ritmo de temas como «Libres« o «Caníbales«.  Una actuación breve pero intensa que animó a los allí presentes. La muestra más evidente de que lo alternativo en castellano también puede ser salvaje.

3

Neuman

Seguidamente, de vuelta al escenario Inside, la banda de Paco Román nos obsequió con una revisión mucho más potente de los temas de su disco IF, el primero con Subterfuge. Canciones como «Turn it» o «Bye fear / Hi love», junto a Ken Stringfellow, sonaron nerviosas y vibrantes gracias  en parte al buen hacer del grupo y en parte también a la buena sonorización de un escenario que, sin ser el principal, sonó mejor que su hermano mayor durante todo el día.

Napoleón Solo

La banda capitaneada por Alonso Díaz jugaba en casa y eso se hizo patente durante el show. Deleitaron a sus fans con temas de su último trabajo Chica disco como «Sueña conmigo«, «Antes de que ocurriera» o «Sospecho sospecho». Pero los momentos álgidos de la actuación vinieron de la mano de temas de su anterior trabajo como «Tiene que acabar», «Perdiendo el tiempo» o «Lolaila Carmona«. Un concierto donde se mostraron muy agradecidos con sus fans por estar allí a esas horas (las 15,50) y donde nos hicieron bailar y disfrutar de una actuación animada y muy cercana.

4

Full

Los sevillanos Full pisaban el escenario del Alhambra Sound tras haber visitado el festival en su primera edición. Se mostraron felices y sorprendidos por la afluencia de público y para agradecerlo cantaron un tema nuevo, «Aullidos«.

Pudimos disfrutar de los temas de su disco Mi primer atraco en la impresionante voz de Javi Valencia. Temas como «Distintos», «Atraco» o «Mejor opción» nos hicieron vibrar, saltar, bailar y corear a voz en grito. Un concierto enérgico de esos que tardas en olvidar, que lo disfrutas al máximo y que, desde nuestro punto de vista, se convirtió en uno de los mejores de la jornada por la perfecta conjunción entre el grupo y su público.

Jero Romero

Jero acompañado por su banda presentaba su último trabajo La grieta. Disfrutamos de un concierto íntimo, a pesar de la gran afluencia de público, y cálido donde la banda fue desgranando sin prisas las canciones de este último disco. Composiciones como «Fue hoy» o «El mejor»  pusieron los pelos de punta a más de uno. Pero Jero no se olvidó de las canciones de su primer trabajo, y así pudimos corear «Ya te lo decía yo«, «Las leves«, «Haciendo eses», «Cabeza de león» o «Desinhibida». En definitiva, una actuación amable y suave, para rebajar la hora de la sobremesa, que nos sirvió de antesala a la próxima actuación de Los Jero Romero en Badajoz.

5

León Benavente

La banda de Abraham Boba sigue con la intensa gira de ¿presentación? de su primer trabajo, y es que León Benavente es una de esas bandas que no te cansas de ver en directo. El ritmo frenético de las canciones fue calentando al público presente hasta hacerlos estallar en su cierre con «Ser Brigada», uno de los momentazos de esta edición del festival. Aunque a buen seguro no fue uno de sus mejores conciertos del verano, vibramos y saltamos con «Ánimo, valiente», «Estado Provisional», «La palabra» o «El Rey Ricardo», e incluso se animaron con «Europa ha  muerto» de Los ilegales. Y es que es innegable que la fuerza y energía de estos chicos sobre el escenario es contagiosa y un directo suyo es sinónimo de conciertazo más allá de sonidos y ejecuciones.

Izal

Mikel Izal y compañía congregaron una gran cantidad de fans en el escenario Negrita comenzando así la espiral de conciertos de afluencia masiva de la jornada. El setlist compuesto por temas de sus dos discos nos hizo chillar, brincar y danzar en el poco espacio que disponíamos.

Nos dejamos la voz con canciones como «Magia y efectos especiales», «Que bien» con sus ya tradicionales confetis, «Prueba y error», «Agujeros de gusano», «Hambre», «Pánico práctico» y su broche final, «La mujer de verde» con la que que hicieron las delicias de sus fans. Una actuación donde no faltaron los agradecimientos a todos sus incondicionales y una invitación al final para “salir corriendo” a ver a Second ya que se solapaban con los murcianos en 15 minutos.

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Second

Sean Frutos y el resto de -la fuga de Logan- anunciaron que esa sería la última actuación con los pijamicas. Tal y como merecía la ocasión nos ofrecieron una actuación potente y llena de fuerza, combinando temas de su último trabajo Montaña Rusa con canciones de sus discos anteriores. Así, pudimos disfrutar de «2502», «Lobotomizados», «La distancia no es velocidad por tiempo» o «Las serpientes» de Montaña Rusa alternados con sus ya éxitos «Rincón exquisito«, «N.A.D.A.», «Muérdeme» o «Autodestructivos» de sus trabajos anteriores.

Como broche final a otro de los mejores conciertos de la tarde su ya tradicional «Rodamos» que desató la vorágine entre sus fans en una espiral de euforia y aplausos para despedirlos.

Tras la actuación de Second llegaron los mayores momentos de agobio vividos en el festival. El pasillo que unía los dos escenarios se vio colapsado por el aluvión de gente intentando llegar al escenario Negrita a ver a Vetusta Morla. (Miedo)

Vetusta Morla

Los de Tres cantos reunieron a cerca de 20,000 personas a sus pies en una actuación donde presentaron La Deriva. Su show estuvo acompañado por un juego de luces e imágenes cuidadas  que complementaban la exposición de  sus temas.

Aunque el grueso del setlist  se centró en los temas de este último trabajo como «La deriva«, «Fuego«, «Golpe maestro», «Pirómanos», «Cuarteles de Invierno» o «Las salas de espera» los momentos cumbres de la actuación vinieron de la mano de sus temas anteriores, algunos de ellos convertidos ya en himnos del indie. De este modo, los momentos más memorables del concierto tuvieron la banda sonora de «Autocrítica»,»Sálvese quien pueda», «Mapas», «El hombre del saco» o «Valiente«. Tras una discurso reivindicativo de Pucho haciendo referencia a la deriva en que vivimos pusieron fin a su actuación con «Los días raros«.

Antes de la actuación de Noni, Alex y demás tuvimos unos 25 minutos de descanso totalmente desaprovechados ya que al no haber actuaciones (Kakkmaddafakka se solapó con Vetusta Morla y The Zombie Kids comenzaba a la vez que Lori Meyers) todo el mundo aprovechó para ir al baño o cenar generándose colas interminables y agobios por doquier.

7

Lori Meyers

Noni jugaba en casa y eso se notaba, no entraba ni siquiera un alfiler en el espacio del escenario Negrita. En el tiempo que duró sus actuación disfrutamos de temas de todos sus trabajos aunque la mayor parte del setlist pertenecía a Impronta. Sonaron «Emborracharme», «Zen» o «Planilandia»  intercalados con sus éxitos atemporales como «Dilema», «Ham´a´cuckoo», «Mi realidad», «Alta fidelidad» o «Luces de neón». No faltó tampoco su ya cada vez menos sorprendente dúo con Anni B. Sweet para interpretar «El tiempo pasará«.

Tras 12 horas de conciertos, cansados y hambrientos (porque fue una odisea cenar allí) nos encaminamos hacia el hostal a descansar para el viaje de vuelta a Badajoz al día siguiente mientras de fondo sonaba «Toro» (Elyella djs) a modo de despedida.

En definitiva, nuestra experiencia en el Alhambra Sound fue agotadora pero en general satisfactoria. Aunque, desde nuestra humilde opinión, existen varios factores a mejorar como las vías de acceso entre escenarioso, una mejor organización y previsión en los puestos de comida y quizás reducir un poco el aforo para estar más cómodos.

¿Repetiremos?

Disco de la semana: Cronolanea – Lori Meyers

Lori Meyers han protagonizado uno de los despegues más supersónicos del pop español en los últimos tiempos: empezaron con un disco notable siguiendo la estela de los mejores Planetas (Viaje de Estudios fue un buen soplo de aíre fresco entre tanto grupo novel con la misma fórmula) y continuaron con una bajada de intensidad con ‘Hostal Pimodán.

Ahora, tras el abrumador reconocimiento de crítica y público, buscan la consolidación a través de ‘Cronolanea, un cancionero detallista y variado que ratifica su pasión por las melodías sesenteras y la furia del rock de los noventa. Para algunos este disco suena mejor y más abierto que los anteriores aunque, como dice Noni “siempre habrá gente a la que no le gustas y gente a la que le flipas”. “Queríamos recuperar la sensación de movimiento, de ritmo, de energía. Sin embargo las letras vienen de lo cotidiano. En sí Cronolanea viene de conjugar cronología o cronovisor con miscelánea que eran conceptos que nos atraían bastante porque reflejaban el proceso de creación de este disco”. “Ahora, al ser seis componentes, se crea un batiburrillo especial. Por eso aludimos en el título a la cronología y a la miscelánea, porque es la mezcla de lo que hemos hecho en todo este tiempo”. (¿Mande?). “La línea perfecta que expresa el recorrido de un grupo en un periodo”. (Ah, bueno ahora ya lo entiendo mejor).

Y es que estos chicos, aunque aún les falta una eternidad para llegar a los 30, tienen una madurez sorprendente para escribir canciones pop de chapita. Me refiero a esa facilidad para componer melodías que no se olvidan y cantarlas con esa armonía tan personal. Debe de ser por esa ambivalencia tan característica entre lo retro y lo moderno.

Así, 540 días después, Lori Meyers aprueba su examen más difícil. Cronolanea engrandece Hostal Pimodán, uno de los discos españoles de la década. Cronolanea puede ser el escalón decisivo hacia el sueño de cualquier grupo: un reconocimiento más amplio. Y la verdad es se antojaba difícil, casi imposible. Hostal Pimodán convirtió a un grupo joven en un clásico incuestionable. Es un disco de esos que gana con cada nueva escucha. Y es que, con la tontería, Lori Meyers llevan 10 años juntos, al menos su trío principal. Tenían 16 añitos cuando empezaron con versiones de Dinosaur Jr. Apenas con 22 terminaron su Viaje de Estudios y un par de años más tarde se alojaban en el famoso Hostal Pimodán.

Cronolanea es ante todo un nuevo punto de partida. Incomparable aunque familiar. Un trabajo que mira al futuro en la búsqueda del idealismo del primero y la hermosura del segundo. Entre el 12 y el 30 de Octubre Lori Meyers se encerraron en los estudios Gismo 7 de Motril, donde residieron “como en un Gran Hermano, pero trabajando”, bromea Noni: “Todo el mundo estaba en el mismo rollo, enfocado al disco, a piñón”, bajo la dirección de Ken Coomer y Charlie Brocco, la ayuda de Antonio Lomas y un cuarteto de cuerda. Coomer y Brocco integran un equipo de producción en Nashville y era la primera vez que venían a España. Tras sendas jornadas de trabajo se llevaron el master a Nashville donde la mezcla final fue enviada a los Sterling Sound (N.York) para su masterización definitiva.

Reaparecen con nervio, repletos de material nuevo con el que hacer divertirse al público de la mejor manera que saben: con un pop de corte clásico que se adapta al 2008 como pocos. De este modo, Lori Meyers aclaran que son ahora mismo una de las cabezas pensantes que hay en el pop indie español. Y todo esto ocurría mientras nos hacíamos la pregunta de qué pasaría después de la trifulca con su anterior sello y la inclusión en la nómina de Universal, “Lo bueno es que ya podemos medio vivir de la música…” aclara Noni.

Si el miedo era que Lori Meyers hiciesen como The Sunday Drivers en cuanto vieron la mina, ese miedo está descartado. No hay una comercialización hacia un pop destinado más a ventas que a la propia música. Los Lori son ellos de nuevo, probablemente, son más que nunca un grupo aparte. “Nos hacen un mínimo de caso, que es lo único que pedimos”. Otra característica de Cronolanea es que Alejandro (guitarra) canta por primera vez y pone voz a tres temas con un resultado… discutible; de la “delicada” Saudade se pasa a las guitarras de Un mundo por delante y El secreto mejor guardado perdiéndose a veces las señas de identidad características de la banda. “Creemos que quien compone el tema tiene un sentimiento especial para cantarlo” dice Noni. Zapatero a tus zapatos pienso yo; aunque de eso ya hablaremos luego.

Intromisión, que abre el álbum, sorprende gratamente por indagar en caminos desconocidos por los de Loja: Casi tres minutos de belleza instrumental con una segunda parte que nos devuelve a los Lori más contagiosos, insolentes y directos. Recuperan inmediatez, que es un activo del grupo. La búsqueda del rol no esta mal pero no es el mejor Noni posible. Luego llega El secreto mejor guardado, la primera del guitarrista. Habría que decirle que el Espíritu de la navidad, de Los Planetas, no es un buen ejemplo a seguir. El estribillo es calcado y además la letra en algunas estrofas se atropella y queda como embotellada aunque, por otro lado, la melodía no esta mal, cambian y suena muy country. Pero las democracias en los grupos casi nunca funcionan bien y en uno como Lori Meyers, que marcha perfectamente así, es mejor no tocar. En Alta fidelidad, corte más arrollador del disco, T-E-M-A-Z-O, es Noni el que pone la voz pero con un registro más agresivo del acostumbrado. Y nueva toma de contacto con Alex, esta vez Saudade, nos regala otra canción muermo. Un nuevo tostón para el disco. Sin compasión la podrían haber firmado Los Planetas. Pero escribe Noni y la adereza con toques country, una melodía pegadiza.

Cúmulo de propósitos es luminosa aunque no nos ofrece nada nuevo y se queda en un medio tiempo correcto. Luciérnagas y mariposas no esta mal, es empalagosa, sobretodo al final, pero puede llegar a convertirse en un clásico de la banda. Funcionará es de las tranquilas, tiene una buena letra y una melodía interesante. En Transiberiano la letra es incolora y muy parecida en temática a las anteriores. Un mundo por delante parece que nos presenta a un Alex más rockero. Luces de neón me gusta mucho. No se parece a nada de lo que habían hecho anteriormente y tiene pinta de ganar muchos enteros en directo. Tiene pegada y desde ya, uno de los estribillos más pegadizos del año (Paparapapapa…). Además de un videoclip muy interesante, con estética intensamente americana de road trip. Un corte de gusto sesentero, coros brillantes y levemente más potente, sin abandonar su huella melódica. Entra a la primera. Copa para dos es un final agridulce con el se pierde la fuerza de esos finales tan característicos de los anteriores discos de Lori Meyers.

Básicamente Lori Meyers han conseguido con Cronolanea su álbum más profesional en casi todos los sentidos. Y digo en casi todos porque las letras, aún no siendo nunca su fuerte, parece que en algunas canciones están puestas a desgana. Además, la influencia de Los Planetas esta más marcada que nunca.

Algunos críticos dicen dos cosas muy negativas del nuevo disco de Lori Meyers: La primera es que el nombre es feo y complicado. Es difícil de recordar, de pronunciar… aunque su contra, la diseñadora Vanesa Zafra vuelve a firmar el diseño de un álbum que cuenta con diversas novedades y sorpresas. El disco viene con una portada muy chula, y al fin y al cabo todo eso son elementos superficiales que nada tienen que ver con su música. La segunda es que muchos piensan que en este tercer trabajo se ha perdido un poco de la originalidad de los primeros Lori Meyers… y además no a todos nos hace gracia que no sea Noni el único vocalista. Personalmente creo que todas estas quejas se deben a que han fichado por la gran multi, lo que les hace perder ese encanto de tocar para una discográfica pequeña y personal, siendo objeto de las iras de ciertos sectores extremistas del indie.

Pero lo cierto es que el nuevo disco de Lori Meyers también contiene canciones adictivas de las de siempre, con un pop muy fresco o temas un poco más nostálgicos e incluso se atreven con un rock un poco chulesco que seguramente resultará muy efectivo en directo. Si de algo puede pecar, es que contiene bastantes canciones “tranquilas”. Así como también abusan a mi juicio de un sonido un poco más americano.

Con este trabajo Lori Meyers se embarca en una extensa gira que le llevará por las principales ciudades españolas, así como también han confirmado su presencia en algunos festivales como el Contempopranea. No os puedo dejar de recomendar ir a alguno de los conciertos, pues además Noni es un tipo bastante simpático y suele interactuar con el público. Anécdota: A finales del verano pasado, los Lori dieron un concierto en la isla de Plasencia. Nosotros no pudimos ir porque creo que fue un martes pero unos amiguetes si que fueron. Por lo visto no se concentraron más de 30 personas a los pies del escenario, todas haciendo botellón y charlando con N-O-N-I entre canción y canción. Al final la banda se unió a sus seguidores y se fueron de farra por el pueblo. A esto que se acercaron unas jipi-pijis y le gritaron: “¡L-O-R-I fírmame!” Todavía se debe estar riendo.

En fin, tercera entrega esperada y camino de ser podium para lo mejor del año, ya que sus máximos “rivales” publicaron en el 2007, y para este 2008 el pastel parece repartirse entre Lori Meyers, Sr. Chinarro, Tachenko y alguno por ahí que dé la sorpresa. Ahora a disfrutar de un disco recomendable para los amantes del pop por el pop.

Cronolanea es el resultado de esos dos años y 20 días, un álbum que no supone un giro radical ni nada parecido, sino la cristalización del estilo Lori Meyers, un escalón más en el viaje que empezaron en Loja hace ya más años de los que podría delatar su edad, Sergio, Alfredo, Alejandro y Noni. Cronolanea es un buen disco y contiene algunos temas imprescindibles como ‘La búsqueda del rol’ o ‘Alta Fidelidad’. Pero se sigue echando en falta esa frescura e mala leche que gastaban en sus primeras grabaciones.